Crítica: Come, reza, ama.

Lo que hay que dejar bien claro es que Come, reza, ama únicamente nos servirá como una vía para dejar la mente en blanco mientras nos deleitamos con un viaje "solamente apto para algunos bolsillos" en busca del equilibrio que todos necesitamos en nuestras vidas.

Basada en la experiencia personal de la escritora Elizabeth Gilbert -- que más tarde convertiría en todo un best-seller literario -- y dirigida por Ryan Murphy (creador del fenómeno televisivo 'Glee'), la historia nos presenta a Liz (Julia Roberts), una mujer de mediana edad cuya estabilidad emocional pende de un hilo. En medio de un complicado divorcio, conoce a un joven actor con el que vuelve a precipitarse al iniciar una relación que no hace más que agravar su situación. Finalmente en un intento por reconducir su vida, decide tomarse un retiro espiritual en un viaje que le llevará a descubrir el verdadero placer de la comida de Italia, meditar en la India y volver a amar en Bali.

Hermana gemela de la mucho más humilde 'Bajo el sol de la Toscana', desde el principio intuimos unas intenciones tan caprichosas como si de un catálogo de revista para turistas ricos se tratase. Resulta especialmente difícil poder identificarse con el personaje de la Roberts, dado que más allá de ciertos momentos en los que podemos ver su lado más frágil y humano, el resto sigue siendo un viaje que mientras a ella le sirve como autoayuda, a nosotros, simples espectadores, únicamente nos podría valer como mero entretenimiento visual, bien por la belleza de la actriz, bien por la cuidada fotografía.

Lo cierto es que el nivel del reparto de la película está francamente bien. Julia Roberts lleva décadas demostrando lo grande que és y, por suerte, el que su personaje nos pueda caer mejor o peor, no desluce para nada su trabajo. Al lado de la actriz, brillan casi por igual una sobria Viola Davis como un divertido y además conmovedor Richard Jenkins, mientras James Franco, Billy Crudup y Javier Bardem se limitan a poner aún más alto el listón de las interpretaciones, siendo quizá este último el que sale peor parado como amante brasileño.

Puntuación: 2.5 sobre 5 estrellas.